¿Prefieres encajar y ser como todos los demás por miedo a ser tu mismo?
Porque eso es la mediocridad. La mediocridad es un un virus resistente y altamente contagioso que a cada momento esta acabando con los cimientos de nuestra sociedad. Necesitamos personas con talento, gente fuera de la media, la mediocridad y el sistema opaca al talento. Hay tantos genios en el mundo creyéndose tontos por fracasar en algo que deberían ser buenos, por no haber obtenido una buena nota en el sistema.
Es importante destacar que la mediocridad no significa estar en la población promedio, significa glorificar la media y demonizar a cualquiera que salga de la misma.
La mediocridad nos permite tener una vida sin problemas, nos encierra en una celda cómoda porque no nos quiere fuera de esa celda. Pero en esa celda de la mediocridad, la puerta siempre esta abierta, podemos salir de ella en cualquier momento. El problema es que es una prisión cómoda, tan cómoda que no nos damos cuenta que estamos ahí hasta que ya es muy tarde y la puerta se cierra, terminando con nuestra vida y entonces te das cuenta que has vivido una vida mediocre.
Debemos rodearnos de gente que nos anime a tomar riesgos y nos motive a continuar intentándolo. Ser aventureros y salir poco a poco de nuestra zona de confort, no hablo de un cambio radical, hablo del tener las agallas de experimentar cosas nuevas y no limitarnos por miedo a quedar en ridículo o al fracaso. La comodidad nos empuja a la mediocridad y sin darnos cuenta nos estanca.
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